El bachillerato tiene como finalidad proporcionar a los estudiantes formación, madurez intelectual y humana, conocimientos y habilidades que les permitan progresar en su desarrollo personal y desarrollar funciones sociales e incorporarse a la vida activa y a la educación superior.
Constituye una etapa de marcado caracter propedeutico, de preparación para futuros estudios universitarios o de formación profesional superior, por lo que el alumnado comienza a tomar decisiones que afectan a su futuro laboral. Así las cosas nuestra tarea como educadores será la de acompañar y ayudar a nuestro alumnado en esta singladura para poner las bases que aseguren el éxito en el futuro: Un individuo feliz y preparado para afrontar los retos.