La Enseñanza Secundaria Obligatoria (ESO) consta de cuatro cursos que una vez superados capacitan al alumnado para seguir su formación, ya sea cursando el Bachillerato o enseñanzas de Formación Profesional de Grado Medio.

En casos excepcionales suele ser más conveniente el orientar a los alumnos hacia programas especificos que los orienten a una salida más prematura al mercado de trabajo. Es el caso de los Centros de Iniciación Profesional (CIP).